De encuestas y resultados. La izquierda en su encrucijada.
Artículo publicado en PUBLICOSCOPIA el 10 Febrero 2015
El pacto firmado por Mariano Rajoy y Pedro Sánchez el pasado
día 2 de manera solemne en el marco del Palacio de la Moncloa y denominado
erróneamente “contra el terrorismo yihadista”, supone un grave error de
imprevisibles consecuencias para el socialismo de nuestro país.
La propia imagen de ambos juntos ha removido los cimientos de
miles de afiliados y votantes socialistas, que han visto en ella la vuelta a
una senda que ya se creía absolutamente abandonada, de “pactos de estado” con
el partido que durante más de tres años ha machacado a su base social,
situándola en un momento de emergencia nacional. Un partido que ha recortado
drásticamente los derechos sociales y ha dinamitado el Estado del Bienestar que
tanto nos costó construir.
Además ver la foto de los grupos que la apoyan junto al PP y
PSOE; UPN, Foro Asturias y Coalición
Canaria, o sea la derecha más derecha del hemiciclo, ha causado un profundo
dolor y alguna dosis de indignación en amplios sectores del socialismo.
Es cierto que algunos medios de comunicación han tergiversado
el contenido del mismo, porque lo que se ha pactado NO INCLUYE NI LA CADENA
PERPETUA NI LA PRISIÓN PERMANENTE REVISABLE de forma expresa. Se acuerda la
duración de las penas de cada delito, señalando en caso de muerte la prisión
por el tiempo máximo previsto en el Código (la que tenga en cada momento), que
ahora es de 30 años, pero que en el otro proyecto de reforma del Código Penal
que se está tramitando ya, se amplía a la mencionada prisión permanente
revisable. Por lo tanto no es cierto que el PSOE haya pactado expresamente la
cadena perpetua ni la prisión permanente revisable; ésta sólo se contempla en
el proyecto de reforma del Código Penal.
Pero no es menos cierto que ésta referencia supone la
aceptación de hecho de dicha reforma, que el PSOE ha rechazado por activa y por
pasiva durante este último periodo. Igualmente suena a un cierto esperpento que
a continuación de esa firma, se plantee que si se llega al poder en Noviembre
ése apartado quedará inmediatamente derogado.
En realidad no se trata
de un debate técnico‐jurídico,
se trata de un inmenso error político. En todo caso las asociaciones de jueces
y fiscales progresistas también consideran que el pacto vulnera los principios
constitucionales, al apoyar la cadena perpetua aunque sea indirectamente.
Desde las propias filas
del socialismo, en especial desde su ala izquierda, se analiza que defender al
PSOE no es apoyar todas las ocurrencias de su dirección, interpretando que éste
hecho recorre una senda que les lleva a ser cada vez más irrelevante. Defender
al PSOE, plantean, es reclamar desde todas las instancias socialistas una línea
política acorde con sus principios fundacionales. Por ello exigen una urgente
rectificación visible del rumbo, para que la mayoría trabajadora reconozca al
Partido Socialista Obrero Español como su referencia, como el Partido de Pablo
Iglesias, Largo Caballero y tantos otros. Defienden necesaria una ruptura
política efectiva y consecuente con todo lo que representa el gobierno del PP y
por tanto se considera éste pacto como un error táctico y lo que es peor
también estratégico.
Incluso se avanza más
desde la izquierda del PSOE al considerar que el texto no sólo va dirigido
contra la actividad yihadista (por cierto con nula eficacia real, porque no
parece que ningún terrorista de éstos grupos se pueda amedrentar por pasar las
penas de 30 años de cárcel a cadena perpetua), sino que va más allá,
especialmente por el artículo 573 que está dedicado a definir qué se considera
como terrorismo. Más parece que se quiera continuar con la estrategia iniciada
con la “Ley mordaza” de controlar a todo lo que se mueva, de reprimir a través
de las leyes cualquier intento de protesta en las calles o las instituciones.
Éste artículo supone un cajón de sastre en el que
con la coartada de la lucha anti yihadista se introducen elementos como, cito
textualmente: “Se considerará delito
de terrorismo la comisión de cualquier delito grave contra la vida o la
integridad física, la libertad, la integridad moral, la libertad e indemnidad
sexuales, el patrimonio, los recursos naturales o el medio ambiente, la salud
pública, de riesgo catastrófico, incendio, contra
la Corona, atentado, desórdenes
públicos, tenencia, tráfico y depósito de armas, municiones y explosivos, y
el apoderamiento de aeronaves, buques u otros medios de transporte o de
mercancías, cuando se llevara a cabo con cualquiera de las siguientes
finalidades: subvertir el orden
constitucional, suprimir o desestabilizar gravemente el funcionamiento de las
instituciones políticas, de las estructuras económicas y sociales del
Estado u obligar a los poderes públicos a realizar un acto o a abstenerse.…” en
el que puede entrar absolutamente todo, desde la resistencia ante un desahucio
a la protesta frente al Congreso, según la interpretación de quien ejerza la
labor represora.
La pregunta que surge es: ¿por qué entonces si todo en el pacto va
contra los intereses del PSOE y además crea un fuerte malestar entre amplios
sectores de dentro y fuera de partido, se ha firmado asumiendo ésa negativa
imagen?
Parece que lo más sensato es responder que se ha hecho por la necesidad
de Pedro Sánchez de aparecer como un estadista ante las críticas que le vienen,
especialmente de la vieja guardia, de frívolo e inconsistente. La larga sombra
de Susana Díaz se cernía sobre su liderazgo cuestionándolo y la famosa reunión
de José Bono y Zapatero con Pablo Iglesias y Errejon lo erosionaba aún más.
Quizás sus asesores le hayan indicado que éste pacto y su parafernalia fortalecen
su deteriorada imagen y le alejan de una primera fase de su mandato más
populista y dicharachera, pero en la que inició la senda correcta para el
socialismo.
Cuestionar el artículo 135 de la Constitución que reformó Zapatero por
presiones externas, atreverse a señalar la necesidad de abrir un nuevo proceso
constituyente que permita la posibilidad de decidir sobre el modelo de Estado,
lo que suponía de facto un incordio para la Monarquía y flirtear con soluciones
para Catalunya y Euskadi muy alejadas de sus predecesores, incluso apuntando a
un estado Federal plurinacional tal y como se defiende por Izquierda Socialista.
Todo ello le situaba alejado del proyecto de quienes han dominado el partido
con mano de hierro hasta su llegada, que estaban muy condicionados por los
poderes fácticos nacionales e internacionales, pero al mismo tiempo le acercaba
a lo que sus bases exigían.
Su acercamiento a éstos postulados de la izquierda del socialismo, hizo
que se activaran todas las alarmas en esos poderes fácticos, lo que puso en
marcha una amplia operación para pararle los pies, que parece ha tenido un
éxito total.
Se equivocan pues Pedro Sánchez y sus asesores, porque el camino
correcto para evitar el descalabro electoral del PSOE era el otro y no éste. La
senda para su regeneración, para recuperar la credibilidad perdida entre su
base social, sus electores también era ése y el nuevo sólo le puede llevar al
desastre como ya indican las recientes encuestas, en concreto la del CIS que
les sitúa en tercer lugar con el PP remontando y Podemos pasándole por encima.
Quizás otra razón para cometer éste error sean las crípticas palabras
del oráculo Felipe González. De las mismas cabe deducir que existe información
de que éste súper año electoral nos da todos los boletos para un gran ataque
del yihadismo, dado que es nuestro país es en el que éste está más presente y
que los aparatos del estado pueden parar algunos de ellos pero parece evidente que resulta muy difícil
por no decir imposible pararlos todos.
Un ataque de gran envergadura éste año supondría directamente la mayoría
absoluta del partido más duro, el PP y quizás con éste gesto se intente parar
en lo posible éste efecto. Recibir ése golpe con el PSOE acusado de no tener
suficiente visión de estado en un tema tan delicado, supondría un efecto
electoral demoledor. Veremos….
Fdo.: José Luis Úriz Iglesias (Ex parlamentario y concejal del PSN-PSOE
miembro de Izquierda Socialista)
Villava-Atarrabia 8 Febrero 2015
Comentarios
Publicar un comentario