"Infancia clandestina"
Acabo de ver en el cine (como se debe de ver) con mi hermana una película
impactante: “Infancia clandestina”, del argentino Benjamín Ávila, hijo de madre
y hermana desparecida y padre que cayó en la lucha por las libertades en la
Argentina de finales de los 70.
Película brutal, no ya por su desarrollo lleno de
sensibilidad, de ternura a través de la mirada de un niño (espectacular el
chaval actor) hijo de padres montoneros que vuelven a su país desde su exilio
cubano para continuar su lucha, incluso desde la violencia.
Brutal en su final, pero también en lo que tiene de
recuperación de una memoria histórica que los cineastas argentinos, a
diferencia de la mayoría de los de nuestro país, se empeñan en que no se
olvide. Pocas películas se han hecho sobre la represión del franquismo y mucho
menos aún de la época que viví y sufrí en vivo y en directo.
He leído en alguna crítica que este film es un
hermoso ejercicio de terrorismo poético, quizás es un término excesivo, pero sí
es cierto que es una visión de la lucha terrorista con una historia llena de
poesía., un terrorismo que no se juzga, solo se muestra.
Con unas interpretaciones sencillamente magistrales
de las que sobresale un Ernesto Alterio que se sale y que cada vez crece más
como intérprete, creíble, sincero, legal, dando un toque de sentido del humor
dentro de ese drama, en mi opinión es el que aporta a la película ese tono que
en algunos momentos la salva de la melancolía y quizás el aburrimiento.
Película para ver, muy recomendada, aunque ya
advierto que uno sale con el corazón acongojado, al menos quienes aún tenemos
la capacidad de emocionarnos con estas historias tan bellamente contadas. Película
que impresiona, pero también que hace reflexionar sobre la bondad y la maldad,
sobre el amor, la infancia quebrada de una generación que sufrió como la
nuestra, aunque mucho más brutalmente.
No dejéis de verla,
aunque ir un día que estéis preparados
Es sumamente interesante cómo se llevó a cabo la trama de la película. Resaltan el trabajo de Teo Gutierrez y César Troncoso. La calidad en la producción es palpable y creo que resulta un filme un tanto estremecedor.
ResponderEliminar